El origen de la Contabilidad puede
remontarse ya a civilizaciones ancestras de a. C., demostrándose
a través de diversos historiadores que en épocas
como la egipcia, griega o romana, se empleaban técnicas
contables que se derivaban del intercambio comercial.
El inicio de la literatura contable queda circunscrito a la obra
del franciscano Fray Lucca Paccioli de 1494 titulada
"La Summa de Arithmética, Geometría, Proportioni
et Proportionalitá", en donde se considera el
concepto de PARTIDA DOBLE por primera vez.
Actualmente, dentro de lo que son los sistemas de información
empresariales, la Contabilidad se erige como uno de los
sistemas más notables y eficaces para dar a conocer los
diversos ámbitos de la información de las unidades
de producción o empresas.
El concepto ha evolucionado sobremanera, de forma que cada vez
es mayor el grado de "especialización" de esta
disciplina dentro del entorno empresarial.
Con respecto a las Finanzas, a comienzos
del s. XX aparecen las obras de Arthur Stone Dewing
(1920, 1930), que constituyen una visión clásica
de la Dirección Financiera de la Empresa basada en una
metodología positiva, descriptiva de la realidad, con excesivo
énfasis en aspectos externos, legales e institucionales,
así como en procesos excepcionales de las organizaciones,
como quiebras, fusiones, absorciones y consolidaciones.
Ya dentro de la cimentación de la moderna teoría
financiera cabe destacar la aparición en 1944 de la importante
obra del profesor Erich Schneider denominada "Investering
und Rente" (Inversión e interés).